En un inicio se entró en el centro para informar a los trabajadores del despido de nuestro delegado sindical, en una clara reincidencia de Mercadona en un despido ilegal, pues ya pasó lo mismo hace 4 años con el mismo trabajador, y fue readmitido tras un largo proceso judicial en el que se tuvo que reconocer las evidencias. Hace poco hasta un cheque en blanco le han sacado cuando se querian deshacer de él por ser un elemento molesto en su modelo de secta destructiva para la explotación laboral. Pero nuestro compañero no aceptó la compra.
Volviendo al inicio de la concentración, al poco de estar informando a los trabajadores, se presentaron dos encargados, junto a un guarda de seguridad, que airadamente nos dijeron que era zona privada y que nos vayamos del interior del centro. Aunque es propiedad de Mercadona, el uso era público, y no había ningún cartel que informase, como manda la ley, de cuáles son las condiciones para entrar. Con todo no quisimos discutir al respecto y nos retiramos hacia el exterior.
Seguimos informando en las puertas de Mercadona, donde un abundante público fue informado del conflicto laboral y las prácticas mafiosas de esta empresa que usa a China como modelo productivo y laboral, en palabras de su presidente Juan Roig. China es ese país donde existe masivamente la explotación infantil, entre otras lindezas...
No fueron pocos los que decidieron no entrar, y otros que nos pidieron que informárabamos con antelación porque no podían permitirse no entrar ese día, por no estar precavidos para ir a otro lugar para hacer sus compras.
Un compañero se encontró con una ventana del área del descanso de trabajadoras, y tras informar a una de ellas y darle una octavilla, apareció uno de los encargados y cerró la ventana.
Dos coches de la policía nacional y uno de la local, más un cuarto que no pudo aparcar, reveló los nervios de los jefecillos de Mercadona que evidentemente empezaron a llamar por teléfono a los dichosos “piquetes del patrón”, interesados en que no se airee la realidad del interior de esta Secta que se dedica a acosar y despedir a sus trabajadores como medio de rentabilizar sus ventas, que a pesar de ser millonarias, o al menos de eso presumen, no es nada comparado en lo que son los primeros en realidad: en el acoso y mobbing, incluso a embarazadas, que desmienten su mito de empresa modelo; la inexistencia de trabajadores de edad relativamente avanzada (por lo que suponemos que el plus por antigüedad tendrá algo que ver); el despido sistemático de cualquiera que plantee reivindicaciones sindicales y de mejoramiento de la situación de los trabajadores, etc. Esa es la realidad del éxito de Mercadona: la miseria y persecución de sus trabajadores para una empresa que adora el estereotipo de los chinos.
Las octavillas se nos agotaron antes de lo esperado, y a pesar de calcular unas dos horas para el piquete, a la hora y poco, tras llevar un tiempo sin textos que repartir, utilizando tan sólo el megáfono y la transmisión oral, dimos por finalizado el acto, pidiendo el boicot a esta empresa que lo único que en realidad que vende ES LA MISERIA.
Vecin@, no compres en Mercadona.
Hasta la readmisión inmediata de nuestro compañero despedido, ¡boicot y lucha anarcosindicalista!
¡VIVA LA CNT-AIT! ¡VIVA LA LUCHA DE L@S TRABAJADOR@S!
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