Primero de Mayo en Canarias

CNT en Canarias se felicita del éxito de las manifestaciones y actos culturales desarrollados por este Sindicato este Primero de Mayo.

A pesar de haber convocado en solitario, al no compartir ni las formas ni el fondo de la convocatoria del resto del arco sindical institucional, un más que numeroso grupos de personas ha mostrado que hay otra forma de hacer sindicalismo y que no están ni por modificaciones ni negociaciones ante la reforma laboral, sino por la total derogación de la misma, así como de todos los ataques recibidos en las últimas fechas contra nuestros derechos sociales.


Recorriendo las calles céntricas de Santa Cruz, y terminando en el Barrio del Toscal, barrio obrero por antonomasia y que ha sufrido en los últimos tiempos un grave ataque especulativo. CNT quería demostrar que el Primero de Mayo no es una fecha para hacer paseos por ramblas y avenidas, como hicieron el resto de mal llamados sindicatos, sino una jornada de reivindicación y lucha, y todo ello a pesar de las cortapisas puestas desde el Ayuntamiento de la capital de Tenerife, que nos impidió desarrollar la labor cultural que teníamos programada para el final de la manifestación en la Plaza Pisaca, como eran talleres infantiles, cuentacuentos, música, etc. La manifestación concluyó con un mitin por parte del Secretario de Acción Sindical al tiempo que se dejó el micrófono abierto para que hablara libremente quien quisiera.

En el resto del Archipiélago, afiliados de la CNT participaron en diversas manifestaciones y actos reivindicativos, destacando lo ocurrido el Gran Canaria, en donde la manifestación de la CNT sufrió el ataque por parte de afiliados de CCOO y UGT, quienes no soportan, por lo visto, que les digan la verdad a la cara; lo más lamentable fue que los agresores fueran defendidos por la policía, la cual no dudó en golpear y atacar a los agredidos, a quienes pretendieron detener, hecho que no tuvo lugar ante la respuesta de muchos transeúntes y manifestantes que comprendieron rápidamente la injusticia que suponía que las personas agredidas tanto por esos supuestos sindicatos y como por la policía, fueran acusadas de altercados y detenidas. Ante esta realidad, la CNT se reserva el derecho de tomar las medidas que considere oportunas para que agresiones como estas no queden sin respuesta.