Para presidir dicho acto los organizadores del premio pensaron en el President de la Generalitat, Artur Mas, con raices maternas en esta ciudad, puesto que su madre, del clan de los “Gavarró”, pertenece a una familia mafiosa del sector textil, el cual, históricamente, ha sido uno de los motores económicos de la ciudad, desde el siglo XIX hasta las décadas finales del siglo XX, forjándose en base a la explotación laboral más encarnizada, el hambre o la adquisición de capital por medios deplorables (estraperlo, especulación urbanística, etc).
Ante dicha situación, desde hace semanas CNT y CGT anunciamos una convocatoria a la cual se adherieron o convocaron de manera autónoma diferentes colectivos y organizaciones, tales como el CSA la Mekànica, el PCPC, l’Ateneu Llibertari de Sabadell, diferentes asambleas de “indignados” de la ciudad o poblaciones próximas como Badia del Vallès, miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca o el MPS (Moviment Popular de Sabadell -Esquerra Independentista-). Ante este llamamiento 300 aguerridas personas mostraron lo que opinaban ante la presencia de tanto burgués, policía uniformado al sevicio del patrón y político servil a los dictados de los mercados.
Los gritos y cánticos de la gente eran claros y concisos, desde los ya clásicos “no hay pan para tanto chorizo”, a los quizá más novedosos como “no es una crisis, es capitalismo”. El repertorio fue variado y elocuente, fresco y, a la vez, increpante ante tanto uniformado policial, a quienes se les recordó que “de azul, verde o marrón, un cabrón es un cabrón”, o a quienes vestían con sus corbatas, pelos engominados (o peluquines de postín) y mirada depredadora, se les recordó que “esos de corbata son unas ratas”. Desde las 19:30 hasta pasadas las 21:00 horas se les recordó unas cuantas verdades y, sin duda, el grado de exaltación verbal fue digno de admiración, voces desgañitadas con o sin megáfono, gritos incansables que se preguntaban a cual mutua acudía Artur Mas, sobre el papel represor de los Mossos, los recortes sociales, reivindicaciones futuras y autogestionarias, en fin, que la cena conmemorativa a más de uno se le atragantó, sólo había que ver la cara del alcalde de Sabadell, el señor Bustos, conocido por sus artes caciquiles y practicar el enchufismo dentro del consistorio, de la alcaldesa de Badia del Vallès, Eva Menor o la de los burgueses que quizá, esa noche, tuvieron pesadillas pensando en la posibilidad de explotadxs conscientes alejándose de las doctrinas adormideras ciudadanistas.
Durante el acto un grupo de espontáneos debidamente equipados cortaron los 4 ó 5 carriles de l’Eix Macià, una de las principales arterias de Sabadell durante algo más de 30 minutos, colapsando el tráfico rodado y dificultando la llegada de los comensales que esperaban la hora del cebado. No está de más recordar que, pese a quien suscribe estas lineas practica el vegetarianismo, que a “todo cerdo le llega su San Martín”. En definitiva, un acto que cumplió las expectativas y que desde CNT de Sabadell lo vemos como una pieza más en el puzle de mobilizaciones ante el panorama que se nos viene encima. Tal y como se decía en la concentración “Ningú, ningú ens representa [nadie, nadie nos representa]“.
CNT-AIT Sabadell
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